23.2.07

A ritmo de tontos

En este mundo hay gente tonta, afortunada o desgraciadamente. Digo que quizás sea afortunadamente ya que para haber extremos tienen que existir opuestos y sería difícil saber qué es lo contrario de tonto si éstos no existieran. Pero, si bien esto es así, también es cierto que muchas veces se usa la palabra tonta sin el contexto adecuado. Incontables son las veces que tan sólo se usa tonto por una equivocación: inocentes niños de 6 años, que lo usan como insulto.

Sin embargo, los tontos existen. Y no digo esto de forma despectiva, aunque pueda parecer que no hay otra, no. Porque ya no es que a veces sientas una sensación de incomodidad, o más bien de no poder aguantar un segundo más a una persona por razones muy variadas, sino que la realidad aplasta. Porque el mundo nos lleva, y la fuerza del arrastre determina muchas cosas. Como darte cuenta de que esa sensación que tú sientes respecto a una persona es un pensamiento general, y que, la pobre, no sale en el diccionario al lado de la palabra tonta, por no usar otras más fuertes y respetar mínimamente su dignidad aunque la pierde cuando abre la boca, porque los de la Real Academia de la Lengua Española aún no la han seleccionado como la mejor candidata, por delante incluso de Bush y de otros genios de nuestra época.

Todo esto puede parecer muy cruel, oh sí, por favor, burlarse de las meteduras de pata de una persona, que tal vez ni es consciente de su grave problema. La verdad, a mi no me importan en absoluto los problemas que a ella le pueda generar su actitud, pero la situación ha llegado a un punto en el que me es insoportable el simple hecho de estar a su lado a pesar de que mi razón me dice que intente dejarlo pasar, como mejor solución posible a semejante continuidad de estupideces. Y no porque me caiga mal, realmente no lo hace, tan sólo es inaguantable cuando abre la boca y yo la tengo que cerrar simplemente por respeto al resto de personas que haya alrededor y porque los puntapiés por debajo de la mesa y los codazos disimulados para que haya paz hartan hasta a Bono, tan pacífico que es el hombre.

Es para morirse de asco ver a una persona que constantemente se mete en las conversaciones ajenas por el simple hecho de hacerlo. Por si los españolitos y españolitas no teníamos bastante con cualquier programa semanal, horario de emisión de tarde, en la mayoría de las televisiones de emisión pública, se le da un poco de gusto a la vida marujeando un rato. Y nadie es tonto por cotillear, de hecho es una práctica bastante común y aceptada totalmente y es que sino pocos se libraban. Creo que el tema a tratar es cuando, dada la conversación que surja de la clase que sea, la persona en cuestión, ignorante absoluta del sentido de las palabras, hace algo sumamente estúpido, por continuar con la tradición: pronunciar palabras seguidas sin orden ni concierto.

Ya se necesita más que fuerza de voluntad y auto control para no mandar a la mierda a semejante personal, con perdón. Porque a la gente le gusta hablar, le gusta contestar con cosas elocuentes y divertidas, genialidades espontáneas que no dudo que en alguna cabeza puedan sonar bien, pero que al ponerlas en bandeja dan verdadera pena. Y que una vez pasa, dos también y al final puede que llegases a acostumbrarte con una paciencia infinita, que dicen que es una virtud y de esas hay pocas cultivables.

Se podría pensar que ya no hay nada más qué decir: que el problema no es que es cotilla, ni que abra la boca sin que su cerebro haya pensado para qué, que no sepa donde están los límites soportables por la raza humana... Lo que pasa y lo único que queda por decir, es que se considera más inteligente que los demás, y no sólo lo piensa en su no muy humilde cabecita, sino que con todo su orgullo de tonta innata, levanta la cabeza y lo dice.

Una vez más lo que se deduce es para pensar si esta sociedad se deja las neuronas en casa cuando madruga y finalmente es un verdadero problema dormir menos de ocho horas.

3 Comments:

At 23/2/07 10:41 p. m., Anonymous Anónimo said...

Mi profesora de Historia (aprovecho cualquier momento para nombrarla, lo sé, pero es que era una sabia) decía que en todas partes hay estúpidos y que los estúpidos no son conscientes de su estupidez... y esa estupidez puede "joder un pueblo", que se dice...

Yo creo que aquí la menda más que tonta es estúpida xD. Ya sabes... "dime de qué presumes y te diré de qué careces", no? Pues eso.

Bsitosssss

 
At 24/2/07 12:05 a. m., Blogger Kevin said...

Muérdete la lengua, pero cuando explotes, explota bien ;-) (se nota que los tíos no sabemos dar consejos xD)

Haz como si fuera un trozo de mierda: aléjate, pasa y rehuye de él U^^

Y al hablar, primero vigilad que no esté por ahí husmeando cuan perro hambriento. Hubo una época donde me metía en muchas conversaciones y al final, como que lo dejé porque me sentía incómodo conmigo mismo.

Así que la chica, modestias a parte, debe aprender de mi xDDD

¡Saludos!

 
At 24/2/07 12:06 a. m., Blogger Kevin said...

Se me olvidaba:
qué se habrá hecho de la columna derecha del blog? o.O

 

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