8.3.08

¿Y hace XXII siglos?

Hoy es el Día Mundial de la Mujer Trabajadora y lo hemos celebrado adecuadamente (gracias por la genial invitación). Ayer se repartió la mini-revista de mi instituto con motivo de este día y, por petición de mi profe de griego publiqué un artículo que había escrito para latín (es que también es mi profe de latín) cuyo tema es la educación en la Antigua Roma o más bien mi visión si hubiera vivido en la Antigua Roma y hubiera querido conseguir algo. Es mi comparación con la actualidad y la celebración de este día:

"Con motivo del fin de mi enseñanza superior se me ha pedido que prepare un discurso acerca de la educación de las mujeres. Yo, gracias a todos los dioses, he podido estudiar por mi condición de patricia y gracias a mi padre, bueno donde los haya, que me ha pagado la educación de un preceptor griego, cuyo trato me ha sido favorable siempre a pesar de ser mujer. Sin embargo, he visto a las hijas de mis esclavas abandonar la educación con poco más de 12 años, cuando su cuerpo comenzaba a mostrarse como mujer.

Si bien los plebeyos no siempre son asunto de patricios, no me gustaría el poder observar a otras mujeres patricias que, teniendo padres menos comprensivos que el mío, hayan abandonado sus estudios en el ludus. Las tareas del hogar son tan importantes como nuestras madres nos enseñan, mas creo que como esposas de grandes políticos o filósofos que podremos ser, debiéramos tener una cierta cultura que nos permitiera escuchar y comprender a nuestros maridos a la vuelta a casa.

Respecto a los esclavos es obvio que hemos de educarlos: un esclavo limpio y educado vale mucho más y es motivo de honra para mostrar. Podrían pasar hasta por hombres libres y, lo que es más, podrían llegar a comprar su libertad. Negamos por el contrario a las esclavas esa educación que las convertiría en mujeres limpias, de carácter honrado, conocedoras de su posición y de las leyes que se les imponen, ya que a poco más de dejar de ser niñas quedan recluidas a sus tareas en el hogar al que pertenezcan.

No digo que todas las mujeres hayan de recibir una importante educación, ya que eso sería un completo desastre, pero es cierto que unas niñas crecen antes que otras y pierden más. Sólo debato acerca de la posibilidad de que, al menos en el estamento patricio, las mujeres tengamos la oportunidad de estudiar hasta los 15 años, unas con un preceptor privado junto a sus hermanos y hermanas, y otras en las escuelas primarias. Tal vez así unas pocas más que ahora tendrían la posibilidad de llegar a niveles superiores, siempre separadas de los hombres a partir de una edad, siendo ese mi caso.

Así, dentro de nuestra dote iría la comprensión y la conversación para nuestros maridos, a los que seguiremos amando y cuidando con más educación, siguiendo el ejemplo de nuestros hermanos griegos."

5 Comments:

At 8/3/08 10:52 p. m., Anonymous Anónimo said...

Buenísimo, niña... yo ya mismo te daba un diez, jeje. Qué manera más preciosa de hablar de la mujer desde la perspectiva histórica. Muy buena la idea, me encantó. Besos.

 
At 9/3/08 11:48 a. m., Blogger Tania said...

Iba a decir exactamente lo mismo que isabel.

 
At 9/3/08 12:00 p. m., Blogger Lauryna said...

Na esperamos veros algun dia mas en la Xunta, aver si venis a astorga:)

Muy chuli el articulo:)

Gracias por el comentario
Te veo el amrtes:) Un besito.Quierote

 
At 9/3/08 12:38 p. m., Blogger Dafne said...

Esta genial Ly! Me ha encantado ^^
Hoy ya voy a votar...y tu nooo laralalaa :P Bezos petite! ^^



pd:ya me voy a pasar mucho más amenudo por aki:D

 
At 10/3/08 11:04 a. m., Blogger Xose said...

Me ha encantado. Te doy más que un diez. Y soy de los de latín y griego ;)
Tu profesor es afortunado.
Un gran saludo

 

Publicar un comentario

<< Home