Miró el reloj. Volvía a llegar tarde, sólo que esta vez era tan diferente: otro país, otro año, otro tiempo, casi otra vida... Tuvo un escalofrío y se estremeció abrigándose más a pesar del buen tiempo con el simple recuerdo de uno de tantos aquellos días de lluvia. La iba a matar con una excusa pobre que era cierta.
Veía el final de la calle y le parecía algo muy lejano. Se sentía tremendamente culpable y a cada paso se le ocurría una forma de marcharse, de disculparse y huir cobardemente aunque ya había decidido que no era eso lo que debía hacer. En los últimos dos días se habían pasado tantas excusas por la cabeza que ya ni siquiera podría discernir las locuras de las posibles. Pero allí estaba.
Ni siquiera sabía lo que quería. Tenía una, dos o incluso tres opciones "serias" y sabía enumerarlas de mejor a peor, de más importancia a menos, pero cuando llegaba la hora de elegir no podía decir sí o no a cada una de ellas. Ni siquiera podía explicarles cómo estaban las cosas en su cabeza, puesto que no lo sabía.
La calle parecía interminable y aunque quería llegar ya, pues sabía que en cuanto le viera decidiría, a cada paso tenía la tentación de echar a correr en sentido contrario.En el fondo de todos aquellos pensamientos entrelazados oía la voz de su Pepito Grillo: "no debes perder una oportunidad por otra", "no debes sentirte culpable, no hay nada por lo que sentirse culpable" pero al mismo tiempo seguía oyendo a su Pepito Grillo anunciar que las cosas no iban a mantenerse sencillas y libres mucho más tiempo.
Ni siquiera Pepito Grillo tenía un voto allí: era su decisión. En cuanto la calle acabó y se situó a pocos metros de él ya había decidido. Aunque al día siguiente tomó otra decisión poco acertada que necesitaba probar, aunque fuera irracional... Pepito Grillo la iba a matar cuando se enterara.
Suspiró mientras dejaba su toalla y se acercaba al agua. Se sentó muy despacio en el borde de la piscina, cerró los ojos y se concentró para no pensar en nada más. Ése era el verdadero sentido del entrenamiento, de nadar, de luchar por ganar dentro de ese líquido transparente.
Lentamente sumergió los pies en el agua helada provocando la reacción de queja de todo su cuerpo, que rápidamente sufrió un escalofrío y su piel, blanca hasta un límite insospechado, se puso de gallina. Volvió a suspirar mientras veía reflejadas en su mente las imágenes de las que intentaba huir. Las respuestas que sus sueños, demasiado imaginativos, le habían dejado en la mañana.
Con un solo impulso se hundió totalmente en ese agua fría y luminosa por los focos de los extremos que le pareció totalmente ajena al mundo en sí. Mientras aguantaba la respiración los pocos segundos que se mantuvo en el agua hasta impulsarse de nuevo a la superficie se dio cuenta de que de ese modo no podría parar su mente: su cuerpo se mantendría ocupado, pero su cabeza podía seguir soñando con sus sueños, con sus sorpresas y con sus anhelos.
Empezó a nadar imponiendo una resistencia al agua, controlando la situación. Rápido, con fuerza, con estilo, con ira. Pronto se dio cuenta de que eso no serviría, de que respirar cada cuatro brazadas no la concentraba ni desconcentraba. Seguía en el mismo estado de aletargamiento que antes, sólo que dentro del agua, que ya no parecía fría.
Después de varios largos se paró en el borde y a través de sus gafas de natación, llenas de gotitas de agua, vio a un grupo de pequeños niños, dos de los cuales tenían el pelo muy negro y parecían muy decididos a saltar sin el flotador adecuado. Se agarraban de la mano demostrando que el miedo sí existía en su mente. Sonrió despreocupadamente mientras olvidaba por un segundo su vida y se centraba en el primer chapuzón de esos dos pequeños.
Pocos segundos después buceaba hacia el otro extremo de la piscina, conteniendo la respiración y con la sensación de que su corazón había dejado de latir por unos instantes, con su pensamiento frío y relajado y con unos pulmones prensados que parecían no pedir más aire durante más tiempo del adecuado.
Cuando llegó a casa cogió su agenda y tachó un nombre y un número de la lista para dejar sitio a otro. A otro que no escribió en el papel puesto que quedaba mucho para que pudiera estar en la misma hoja donde estaba el otro número, hoja ahora completamente vacía. Por fin, cogió aire profundamente y respiró.
Esta mañana falté a mis dos últimas clases para ir al médico a que me diera malas noticias ya evidentes. Es simplemente que al decirlas con la palabra "correcta" o más específica a mi cerebro le suena peor. A parte de las (ni siquiera necesita un adjetivo, hay lo que hay) noticias me ha dado cinco pastillas, gotas, ampollas (agregando encima que es un tratamiento suave)... y una invitación para ir a tocar con su hijo y el grupo de éste. Eso último no son malas noticias para nada pero el resto me hace sentirme como una jubilada que necesita veinte tipos de medicación.
Sin embargo no me quejo. Cada uno se conoce a sí mismo y (exceptuando enfermedades tipo cancer que no puedes saberlo) sueles tener una idea aproximada de qué te está pasando. Así que yo no me quejaré porque si funciona el tratamiento todo irá mejor. Además, es la primera vez que le veo sentido al secreto profesional de los médicos.
Tras salir del médico a la una y cuarto del mediodía decidí ir a la biblioteca (qué pesada soy) para devolver el libro que llevo cinco días intentando devolver. Sigue lloviendo y sigue existiendo la cuesta. Y ahora no cierran a las dos porque (la señora de la limpieza está ya harta de mí, me imagino) han extendido el horario de verano y cierran a la una porque no consideran necesario abrir otra hora. Voy a subir esta tarde y como no pueda devolverlo y coger otro me quedo el libro hasta que tenga la cara de llamarme para decirme que se me ha pasado el plazo.
Tendré mis problemas de salud pero sigo teniendo muy mala leche.
Quiero ser funcionaria. Ah, ya sé que es un topicazo pero hoy cuando me levanté (a las ocho) recordé que tenía que ir a la biblioteca. Hoy aquí no es fiesta así que tendría que estar abierta como el resto de las tiendas. Decidí esperar hasta las diez y media porque supuestamente abren a las diez pero yo sé lo que pasa si vas a las diez: que estará cerrado. Claro que a las once también estaba cerrado. La señora de la limpieza (que sí estaba trabajando) me dijo que no abrían porque la bibliotecaria, que sólo hay una, se había ido a no sé dónde y no volvía hasta mañana. Mmm, interesante.
Analicemos la cuestión: La biblioteca está en la parte más alta de una cuesta, porque en mi barrio todo lo importante (el médico, el colegio, el instituto, el centro deportivo, la biblioteca...) está al final de una gran cuesta, que he subido, aceptando que tienen un horario patético que ya me gustaría a mí como estudiante (de diez a dos y de cinco a ocho, no madrugas y te echas la siesta) en un día que no es fiesta recordando también que debería haber abierto el sábado y no haber hecho puente como hizo. Lleva cuatro días lloviendo, granizando o con tormenta sin parar y estamos a cuatro grados (que para mí es frío).
Con todos esos datos, el hecho de que la bibliotecaría no tiene título ni tiene nada (de hecho antes daba clases de catecismo) y no sabe que Jane Austen tiene más libros que "Orgullo y prejuicio" y que Edgar Allan Poe escribió cosas que no pueden estar en la sección de tres a seis años además de que se hace puente cuando le apetece porque sí y que no cataloga los libros para poder ponerles un código y controlarlos digitalmente para que luego no me diga que no, que es que no sabe dónde está el libro, porque está muy ocupada hablando con el médico amigo suyo que sale de la consulta en horas de trabajo porque los teléfonos de pedir cita no funcionan debido a la tormenta (es que subí a la biblioteca el miércoles y ya quedé calentita) y claro, el aprovecha para irse a la biblioteca a charlar un rato y a coger libros que tienen lista de espera saltándosela así, porque es el médico, me pone de muy mala ostia.
Y la última apreciación es respecto a los libros: visto lo visto me supongo que la que decide una parte de la inversión del dinero para libros de la biblioteca es la propia bibliotecaría porque es realmente curioso tener colecciones completas de novelas rosas de Danielle Steel y no tener clásicos, que se supone que es lo que tendría que tener una biblioteca pública.
No se puede decir a alguien que vive de sueños que los sueños, sueños son y ahí se quedan mientras pasa el tiempo. Es hasta moralmente reprobable y lo más importante de la retahíla de cosas que dicen, que gritan, que exigen o que limitan es el estallido de la burbujita tan resistente que se regenera automáticamente por muchas veces que estalle y por muchos años que pasen cuando el concepto de sueños deriva en nada. La nada es vacío, produce vértigo y lo odio. Las consecuencias son realmente desagradables aunque parezca sencillo ocultarlo, otra vez.
Los sueños están idealizados y eso significa que cuando se cumplen también estallan un poquito, pero no desaparecen. Por tanto, es un dicho estúpido.
Estoy leyendo un libro ligero (de contenido, no de peso) y me he encontrado con un párrafo curioso acerca de "Cumbres borrascosas". Es curioso porque ha utilizado exactamente las mismas palabras para defirnirlo que yo usé hace cosa de un año y algo cuando acabé de leerlo:
"Los personajes son gente horrible que se dedica a arruinar la vida a los demás. No es una historia de amor, sino de odio."
Es agradable ver que alguien usa tus mismas palabras para describir la misma descripción de asco frente a una novela que sin embargo tiene alguna atracción indescriptible la primera vez que la lees. Tal vez porque es un clásico y hay casi una obligación a leerlo o porque hay que leer de todo. De esta forma se llega a la conclusión de que las hermanas Brönte estaban enfermas, psicológicamente hablando.
Hoy es San Patricio lo que quiere decir que: es el día nacional de Irlanda y como irlandesa adoptada hay que celebrarlo, se cumplen diez años de la grabación del concierto en el Royal Albert Hall por The Corrs que habrá que ver por la tarde antes de salir como recordatorio y nuestra coneja irlandesa favorita, Caroline Corr, cumple (creo) 35 años.
También tiene consecuencias a menor escala: hay que vestirse de verde y ponerse todos los adornos que tengas de Irlanda (en mi caso y después de las compras en Dublín, unos cuantos), hay que sacar la bandera planchada y lucirla, hay que olvidarse del sentido de la vergüenza y ponerte el susodicho gorro de Guinness y aceptar que te vas a quedar sin un solo euro porque a cada dos pintas de Guinness hay un regalo y porque es el día oficial en el que puedes beber esa cerveza negra sin que nadie piense que eres un friki porque todos a tu alrededor lo son y nadie se extraña de que no te pidas una Mahou.
Cada año por estas fechas me apena no estar en Irlanda y este año aún más porque podría salir con mis "hermanos" irlandeses y sus amigos, aunque algún día lo haré. Sin embargo, aquí también hay gente muy especial que hará que esto parezca Irlanda.
¡Feliz San Patricio para todos! Happy St. Patrick's day!
Dado que los SlideShow de Photobucket me toman un poco el pelo y que me estresa tener que subir y eliminar y corregir códigos html para poder ponerlos aquí, me he creado una cuenta en DeviantArt, página que llevo visitando muchísimo tiempo gracias a CMG, para colgarlos de forma más cómoda, poder comentar a otros artistas y sobre todo, para darme cuenta de la cantidad de gente que tiene Moulin Rouge, Sweeney Todd y Eduardo Manostijeras como películas favoritas. Es asombroso.
Llevo menos de una semana con ella así que aún estoy aprendiendo a manejarla y a subir cosas, aunque he subido bastantes creaciones, casi todas con Photoshop y alguna que otra foto. Cuando tenga tiempo para buscar por los CDs encontraré paisajes y fotos más originales.
Toda la web es en inglés así que las explicaciones de las imágenes las he puesto también en inglés. Lo siento para los que no lo entiendan, pero es que si no tampoco me lo entenderían los de allí... o no la mayoría. Para ver la galería pulsad en 'Browse Gallery'.
Espero dejarla toda preparada y con bastante contenido durante esta semana de vacaciones en la que pienso hacer tantas cosas. Felices vacaciones y espero que os guste.
La página, haciendo eco de mi originalidad es: www.lyra06corr.deviantart.com Supongo que así la gente logrará recordarla si algún día le interesa acceder sin enlace disponible. Hay un botón de enlace en la barra de la derecha justo debajo del botón del blog.
confensando después de varias conversaciones. confesando tras una película depresiva, de una muerte literaria patética y de anular una cita. dos horas de hablar por teléfono porque sí. confieso que me pregunto por qué sólo hablamos cuando se va y me llama por teléfono, aunque realmente no tiene verdadera importancia. no hablaba con él hoy. confieso que me siento culpable de quedar con alguien por otro alguien al que le importa aún menos que el pronóstico meteorológico. sin embargo sé que me digo eso para contentarme. no se puede escribir un guión que habla de una noche de sexo en la que se recuerda el pasado, porque deprime al que lo ve. las conversaciones irónicas en inglés hace que a veces pierda el sentido del tiempo, del espacio, de morderme las uñas hasta sangrar. y si mi personaje favorito de un libro es la mala malísima es porque es la única verdaderamente humana en una serie de siete novelas en las que los buenos son tan maravillosos e idealizados que ni siquiera son personas. no quieren hacer daño, salvan incluso a los que les intentan matar; no son vengativos, rencorosos o ambiciosos. sólo piensan en los demás, en salvar el mundo y en acabar con su media naranja. esa idea resulta menos imaginativa que el guión antes nombrado. han matado a mi mala malísima de una forma patética, triste, menos esmerada que la muerte de una lechuza blanca: por un ama de casa que se ha pasado unas dos mil páginas cocinando con la varita. lo más triste es que ni siquiera nos apetecía salir hoy: ni tomar una cerveza, ni echar un billar, ni esperar una invitación de alguien poco galante que nos haga reír. hoy es un día de gastar dinero, leer finales idealizados y ver pelís malas. hay días para todo y este lo confieso así: en minúsculas.
He recogido del correo este folleto que me parece importante. Pinchad sobre él para verlo ampliado:
El folleto ha sido enviado por la USPC, como bien pone en la portada y consiste básicamente en una petición a la población de Corvera de Asturias (atención al apartado "Política"), donde yo vivo, a anular su voto. Me parece realmente patético que esto se produzca, sea en esta población o en cualquier otra.
Aquí expresado queda muy bonito poner que se hace esta propuesta a los habitantes de Corvera para que se demuestre que los valores democráticos existen y que las coaliciones no deberían ser permitidas de este modo, sobre todo si le quitan el puesto al querido señor Belarmino Moro, ex-alcalde (y que tiene una hija que está la mar de bien en Madrid). "Sólo tenéis que tachar algún nombre de la papeleta que elijáis y si lo deseáis podéis escribir algún comentario alusivo a la razón de vuestro voto". Es fantástico captar algún inocente que no comprenda realmente sus actos.
Bien, lo primero es que están pidiendo eso por "razones democráticas". Leánse (los del USPC) la definición de Democracia. Se puede pedir el voto en blanco, pero pedir el voto nulo es una idea bastante anarquista que influye en la legitimidad política que ellos tanto buscan.
Es un tanto egocéntrico pensar que tres partidos tan diferentes se hayan unido con el único fin de luchar contra la USPC, un partido que no existe fuera de aquí, que no hizo nada en cuatro años y que no tiene mayor significación. Tal vez el motivo sea luchar por todo lo que no han hecho la USPC. Ya empieza a ser una barbaridad el pensar que los líderes políticos que se presentaban en las elecciones generales estaban al día de lo sucedido en este pequeño concejo de Asturias que pasa desapercibido generalmente, pero para estos señores y señoras no lo es.
Querida Unión Social Progresista de Corvera: las coaliciones existen y son legales, y si no fíjense en Cataluña; la decencia democrática no se consigue mediante la manipulación del pueblo en unas elecciones ajenas a su competencia y, en tantos por ciento, el voto de una pequeña población como Corvera no influirá decisivamente en la elección de un candidato a la presidencia de España. Deberían aceptar su derrota, que ya va siendo hora.
Y si creen que es un buen recurso literario usar el "es sabido" ocho veces en la misma hoja y no corregir las faltas de ortografía, necesitan un relaciones públicas que, ya de paso, podría comentarles que tiene poco sentido mandar folletos con una petición semejante a ésta un día después de las elecciones.
Este post va dedicado a la guardiana del pasillo prohibido que nos obliga a dar vueltas y vueltas sin sentido.
A veces una persona que conocemos nos sorprende y defrauda y, en ese mismo día, esos millones de personas que desconocemos hacen algo que crees bueno, positivo y que nos llevará hacia delante. Todo va hacia delante. Buenas noches y buena suerte en este eterno domingo.
Hoy es el Día Mundial de la Mujer Trabajadora y lo hemos celebrado adecuadamente (gracias por la genial invitación). Ayer se repartió la mini-revista de mi instituto con motivo de este día y, por petición de mi profe de griego publiqué un artículo que había escrito para latín (es que también es mi profe de latín) cuyo tema es la educación en la Antigua Roma o más bien mi visión si hubiera vivido en la Antigua Roma y hubiera querido conseguir algo. Es mi comparación con la actualidad y la celebración de este día:
"Con motivo del fin de mi enseñanza superior se me ha pedido que prepare un discurso acerca de la educación de las mujeres. Yo, gracias a todos los dioses, he podido estudiar por mi condición de patricia y gracias a mi padre, bueno donde los haya, que me ha pagado la educación de un preceptor griego, cuyo trato me ha sido favorable siempre a pesar de ser mujer. Sin embargo, he visto a las hijas de mis esclavas abandonar la educación con poco más de 12 años, cuando su cuerpo comenzaba a mostrarse como mujer.
Si bien los plebeyos no siempre son asunto de patricios, no me gustaría el poder observar a otras mujeres patricias que, teniendo padres menos comprensivos que el mío, hayan abandonado sus estudios en el ludus. Las tareas del hogar son tan importantes como nuestras madres nos enseñan, mas creo que como esposas de grandes políticos o filósofos que podremos ser, debiéramos tener una cierta cultura que nos permitiera escuchar y comprender a nuestros maridos a la vuelta a casa.
Respecto a los esclavos es obvio que hemos de educarlos: un esclavo limpio y educado vale mucho más y es motivo de honra para mostrar. Podrían pasar hasta por hombres libres y, lo que es más, podrían llegar a comprar su libertad. Negamos por el contrario a las esclavas esa educación que las convertiría en mujeres limpias, de carácter honrado, conocedoras de su posición y de las leyes que se les imponen, ya que a poco más de dejar de ser niñas quedan recluidas a sus tareas en el hogar al que pertenezcan.
No digo que todas las mujeres hayan de recibir una importante educación, ya que eso sería un completo desastre, pero es cierto que unas niñas crecen antes que otras y pierden más. Sólo debato acerca de la posibilidad de que, al menos en el estamento patricio, las mujeres tengamos la oportunidad de estudiar hasta los 15 años, unas con un preceptor privado junto a sus hermanos y hermanas, y otras en las escuelas primarias. Tal vez así unas pocas más que ahora tendrían la posibilidad de llegar a niveles superiores, siempre separadas de los hombres a partir de una edad, siendo ese mi caso.
Así, dentro de nuestra dote iría la comprensión y la conversación para nuestros maridos, a los que seguiremos amando y cuidando con más educación, siguiendo el ejemplo de nuestros hermanos griegos."
Esto simplemente es una conclusión personal: soy celosa. Realmente sólo recuerdo que soy celosa cuando veo el más mínimo motivo, por lo que el motivo es casi inexistente. No aprendo, definitivamente. Soy celosa, siempre lo he sido y de continuar así seguirá sin beneficiarme en absoluto. Me cabreo conmigo misma pero me cabreo aún más con la gente por la que estoy celosa. No tengo demasiado motivo, como ya he dicho, pero lo peor es que no tengo derecho, sobre todo si no lo hablo. Ser celoso es una característica de muy poco valor y el "nuestro" en vez del "mío" no es uno de mis pronombres favoritos.
Sólo una cosa me ha alegrado hoy en día pero sé que esa pequeña anécdota tendrá una gran repercusión tres horas a la semana los próximos tres meses porque me hará sonreír. Y mucho.
"Platero y yo" es un libro del autor Juan Ramón Jiménez es una elegía en la que se recrea la vida y muerte de un burro llamado Platero. La verdad es que no recuerdo lo que estudie de este libro hace dos o tres años en literatura, pero este año se nos ha refrescado la memoria (aunque no viniera a cuento ya que el pobre Platero tiene poco que ver con el griego clásico) y después de leer algunas pequeñas partes de la obra hemos tenido que escribir nosotros una parte.
Lo cierto es que la explicación consistía en que Platero era una parte del autor, como su otro yo. Por tanto, al escribir sobre nuestro Platero debíamos ser nosotros mismos. Aunque eso no ha quedado especificado por lo que puede que yo sea la única que haya escrito algo así. Simplemente aquí está, porque es curioso ver en un animal reflejados todos los rasgos de nuestra personalidad:
Mi "Platero" es una hembra pero no le importa ni femenino ni condición para convencer a los demás de que a cualquier cosa se podrá enfrentar. En la calle nunca muestra el miedo, ni a sus amigos ni a sus adversarios, pues en su corta vida ya ha experimentado lo suficiente como para no someterse a ningún agravio. A pesar de ello es dulce, sensible, y requiere abrazos. Se muestra fría y autoritaria mas con una caricia o una palabra puedes ablandarla. Su pelaje gris siempre tiende a estar mojado, pues la lluvia es su temporal más amado. La magia y los misterios siempre le han apasionado. Tiende siempre a escuchar y cuando le hablo sé que comprende más de lo que he pronunciado y que incluso a veces entiende cosas que ni siquiera he imaginado. Esto no siempre le sale bien, puesto que sobreentender le trae problemas con quien cree que no le ha escuchado, con quien cree que ha avanzado demasiado. Es valiente y decidida, rencorosa y vengativa. Cree tener experiencia y al mismo tiempo se pierde, escucha y cuando, por las noches, me mira con los ojitos marrones arrasados en lágrimas, sé que sigue siendo mi pequeña, perdida y solitaria. Sociable ante el mundo y sensata en sus decisiones, sola con su mente e indecisa realmente, así es mi pequeña.
¡Y me cabrea dar los mismos siglos en literatura una y otra vez y no llegar nunca jamás al siglo XIX inglés!
Después de vivir cuatro días (muy cortos) sola el volver a escuchar el ruido de mi familia: a mi hermana corriendo por casa después de volver de casa de mis abuelos, a mi madre gritando cosas incomprensibles, ya que siempre las dice desde la otra punta de la casa, y a mi padre cargando todos los aparatos electrónicos sin batería después del viaje de negocios que han hecho los dos... es raro. Raro, ruidoso e incluso estresante. Es que me acostumbro muy pronto a las rutinas que me creo yo sola y que nadie me puede cambiar.
No es lo mismo cocinar para uno que para cuatro (mucho menos si tienes una hermana pequeña adicta a la comida italiana), no es lo mismo limpiar lo que mancha uno que cuatro, ni volver de trabajar y oír silencio, ni volver del instituto y seguir oyendo silencio (conste que el silencio es muy preciado para mí, sobre todo si me pongo a estudiar)... Tampoco estoy acostumbrada a ver en el salón con el Home Cinema todas las películas (ñiñis o del género que sean) que yo quiera sola, o acompañada...
Es simplemente fantástico y muy relajante el estar completamente sola durante un tiempo. Para pensar en tus cosas y sólo oírte a ti misma durante horas. Debe ser así de relajante porque no es como vivo siempre. Teniendo en cuenta que soy muy sociable sino no tendría ningún sentido con mi forma de ser y es posible que, pasadas unas pocas semanas, me sintiera tremendamente sola. Claro que invitar a gente soluciona cualquier problema que pueda surgir (comprobado).
Mi opinión es que la soledad temporal es muy sana: estar contigo mismo al mismo tiempo que invitas a tus amigos para disfrutar su compañia y el silencio posterior. Ahora tengo un tick nervioso no sé por qué extraña razón: si porque todo ha vuelto a la normalidad o porque no quiero que mañana sea lunes bajo ningún concepto.
De entre todas las cosas que han comprado para la tienda (cierro los ojos y veo futuros inventarios) han traído unos anillos de piedra que cambian de color. Son los típicos que supuestamente según tu estado de ánimo tienen un color u otro. Bueno, según esto me siento desesperada y tranquila al mismo tiempo. Se ve que funciona...
Al igual que con la música me sucede con los actores y actrices. Cada cierto tiempo y por alguna razón no muy concreta me "obsesiono" con uno/a. Suele ser porque la película que protagonizan (o en la que simplemente participan) me gusta, en especial su papel, su personaje o él/ella en sí. No suele ser algo puramente físico ya que eso está bien (mis hormonas me impiden decir lo contrario) pero no me lleva a disfrutar nada del cine.
Ésta es la temporada del director Tim Burton y por tanto de Helena Bonham Carter. Y como no creo que ella sólo participe en películas y por tanto tenga éxito por acostarse con quién se acuesta, he decidido buscar películas suyas de otro director.
Supongo que la más importante (ya que fue nominada a un Óscar por ella además de las otras tres nominaciones que tuvo la película) es "Las alas de la paloma". Película realmente difícil de conseguir tanto por medios legales como no legales. Finalmente se ha conseguido con unos resultados no muy satisfactorios pero tampoco tan desastrosos como se podía imaginar.
"Las alas de la paloma" es una adaptación al cine de la novela del mismo nombre de Henry James, al que ahora quiero leer. Estoy enamoradísima del siglo XIX y de los comienzos del XX. De hecho yo quiero vivir en esa época, ponerme esos trajes y ser como las protagonistas de Jane Austen o de este mismo libro/película. Ahí nadie me diría que tengo que tomar el sol.
La sinopsis me interesó realmente pero lo que me ha hecho afirmar que yo tenía razón y que no se es buena simplemente por meterte en la cama con un director (otra cosa es que consigas más trabajo, ahí ya...) es la magistral forma en la que Helena se ha metido en el papel de una mujer manipuladora, inteligente, despierta y que se sabe adaptar a cualquier situación para sacar ventaja de ella, o a casi cualquier situación, y que al mismo tiempo sufre por ella misma y por los demás, que está enamorada y que a veces pierde el norte por conseguir lo que quiere. Tal vez me guste porque me siento muy identificada con el personaje.
Una película fantástica, con un final un tanto obvio (tal vez sólo si eres tan negativo como yo... supongo) pero sorprendente igualmente. Una magnífica interpretación, un libro más a la cola, la esperanza de encontrarla en DVD, un punto más para Helena y una pregunta: ¿por qué quemaría la carta? ¿cómo puedes quemar una carta cerrada con una autora muerta que nunca te dirá que escribió y sin que nadie sepa que hay en ella? Y luego, cuando pienses en todo lo que ha pasado, porque lo harás, ¿no está claro que te arrepentirás de haberla quemado?
Supongo que la respuesta es que hay cosas que es mejor no saber (no estoy en absoluto de acuerdo con ese dicho) o que... simplemente, es una película. La recomiendo y a ver si así alguien me puede responder el porqué a la carta.
En el fondo de todos aquellos pensamientos entrelazados oía la voz de su Pepito Grillo: "no debes perder una oportunidad por otra", "no debes sentirte culpable, no hay nada por lo que sentirse culpable" pero al mismo tiempo seguía oyendo a su Pepito Grillo anunciar que las cosas no iban a mantenerse sencillas y libres mucho más tiempo.
